Usando un método no invasivo para estimular el cerebro conocido como estimulación de corriente alterna transcraneal (tACS), que envía corrientes eléctricas a través de electrodos en la superficie del cuero cabelludo, un equipo de investigadores liderados por el Dr. Reinhart realizó una serie de experimentos en 150 personas de entre 65 y 88 años. Los participantes llevaron a cabo una tarea de memoria en la que se les pidió que recordaran listas de 20 palabras que un experimentador leía en voz alta. Los participantes se sometieron a tACS durante toda la duración de la tarea, que duró 20 minutos.
Después de cuatro días consecutivos de este protocolo, los participantes que recibieron estimulación de alta frecuencia de la corteza prefrontal dorsolateral mejoraron su capacidad para recordar palabras del principio de las listas, una tarea que depende de la memoria a largo plazo.
Quedan varias preguntas. Hasta qué punto los beneficios de la estimulación cerebral se pueden generalizar a otros tipos de tareas de memoria y si las mejoras en la memoria pueden persistir durante más de un mes son dos cuestiones clave que el equipo planea abordar en estudios futuros. El equipo también está ampliando el trabajo y analizando si tACS puede ayudar a las personas con afecciones como la enfermedad de Alzheimer, agrega, dado que el estudio indicó que la estimulación cerebral podría brindar los mayores beneficios a aquellos que, para empezar, tienen una función cognitiva deficiente. “Esperamos poder ampliar este trabajo de manera significativa y contribuir con más información sobre cómo funciona el cerebro”.
Bibliografía: Nature